La vida de León ha sido una vida de pena y sufrimiento, cuatro años sirviendo a un pastor quien decidió que el mejor pago a su trabajo era dejarle abandonado a su suerte en esos sitios donde se dejan a los animalitos cuando no se los quiere, hasta que llegara el momento en que acabaran con su vida.
Buscamos un hogar para él, alguien que le dé un rayo de esperanza. Es noble, cariñoso y amigable.
Tiene las pruebas de Leshmania, erquilia y filaria negativo y está vacunado. Se entregará esterilizado.
Aún nos tiembla el cuerpo: esta noche León, el dulce León ha fallecido. Ha sido atacado por otro perro de su casa de acogida....aunque él lo intentó, nunca pudo ser felíz. Descansa pequeño